Planear con anticipación es uno de los valores más importantes que, como muchas madres, comparten las personas con negocios exitosos. Para CODESPA, el valor de invertir en las mujeres no es una novedad, y los resultados lo demuestran. La mayoría de mujeres con las que trabajamos, son madres.

“Empiezo el día acudiendo a mi iglesia, luego voy al campo, donde tomo el desayuno antes de comenzar a trabajar, y me quedo ahí hasta las 17:00. Al campo suelo ir tres veces por semana, y el resto de los días, excepto el domingo, me ocupo de las actividades que me reportan ingresos”

Es el relato de Augustin Kamondo, una  madre de familia de 51 años que vive en la pequeña localidad de Kingi, perteneciente a la provincia de Kivu del Norte en la República Democrática del Congo. Trabaja como productora y comerciante de productos agrícolas y está al frente de una familia con 11 hijos.

El mayor cambio al que se ha enfrentado Augustin ha sido concebir una nueva forma de emprendimiento, fruto de la formación recibida del proyecto Rural Market Development for the Poor (RM4P). Además, gracias a la implementación del proyecto, la familia Kamondo ha visto cómo sus ingresos se han multiplicado por cuatro; porque si antes reunía un promedio de 2$ al día, ahora obtiene 8$.

“Recibir la formación empresarial adecuada me ha ayudado mucho, ya que no solo he aprendido a diversificar mis fuentes de ingresos sino que ahora también sé cómo  ahorrar dinero y aprovechar al máximo los espacios de mi parcela. Además, hemos  mejorado en calidad de vida incorporando una dieta más variada y saludable en la familia”

Cuando invertimos en una madre emprendedora le brindamos los recursos que necesita para aprovechar las fortalezas que ya tiene. Fortalezas que consiguen transformar la vida de su familia y de aquellos con los que comparte su día a día. A esto se le llama tener un espíritu empresarial, y permite desarrollar habilidades que se pueden enseñar y cultivar a través de programas de formación adecuados. La voluntad de aprender, una mayor efectividad en la resolución de problemas, flexibilidad, o creatividad son solo algunas de las habilidades más brillantes de las madres emprendedoras.

En el mes de mayo, nos acordamos de todas ellas porque con su labor transforman el mundo.