La localidad de Esperanza, en la región de Agusan del Sur de Filipinas, es una de las principales productoras de arroz de la zona. Los ingresos de gran parte de la población más vulnerable provienen casi exclusivamente de la agricultura, con los consiguientes riesgos que esto conlleva al no contar con una producción diversificada. Este es el caso de Elisabeth Wei, madre soltera con tres hijos que encuentra en el arroz su principal medio de vida.

Negocios inclusivos para apoyar a los más vulnerables

Para mejorar la situación de estos agricultores, hemos puesto en marcha una estrategia de negocios inclusivos que gira en torno al cultivo del arroz bajo el nombre de “rice-duck farming”. La idea consiste en utilizar a un pequeño animal, el pato, como generador de fertilizante orgánico, lo que permite un mejor crecimiento de este cereal. Una vez cosechado el arroz, cuyo ciclo de cultivo tiene una duración de cuatro meses, los productores también reciben ingresos por los patos, que venden en el mercado como un producto independiente. A través de unas sencillas formaciones, enseñamos a los agricultores participantes este modelo innovador para que puedan fortalecer sus producciones y ellos, a su vez, difunden lo aprendido entre otros agricultores menos experimentados.

Elisabeth Wei, #unahistoriaquecontar

Elizabeth ha sido una de nuestras alumnas en estos talleres. Decidió incorporar la tecnología de arroz y patos en noviembre de 2013. “Me ha cambiado la vida”, afirma. “Antes de integrar este sistema ya producía arroz orgánico, pero los costes eran muy elevados y hacían que el margen de venta fuera muy bajo”. Desde que comenzó a trabajar a través del “rice-duck farming”, los patos suministrados por la Fundación Parfund, aliado de CODESPA en esta iniciativa, han conseguido suplir los productos fertilizantes y pesticidas, permitiendo un mejor desarrollo de los cultivos. Esto ha tenido consecuencias directas en el margen de beneficio, mejorando sus condiciones de vida

“Desde que utilizo este sistema de fertilizantes, toda mi familia trabaja en el cultivo y recibe su correspondiente salario, incluyendo a mi madre”, nos cuenta. Además ha podido ofrecer a sus hijos estudios en agricultura en diversas escuelas, mejorando su formación. Elisabeth desea que el “rice-duck farming” se extienda, para que así ayude a más agricultores como ella.

A través de este proyecto de negocios inclusivos en Filipinas, se espera beneficiar a 196 agricultores, con la particularidad de que, como parte de un proyecto piloto, la empresa de arroz orgánico GlowCorp firmará un acuerdo de compra de arroz orgánico integral a los agricultores beneficiarios al final del proyecto. Posteriormente, este arroz se venderá a precio “premium” en Manila, lo que revertirá en un mayor beneficio para los productores.

De esta manera, conseguiremos aumentar los ingresos de los agricultores a través de la venta de arroz saludable producido a través de una nueva tecnología y la venta de un nuevo producto: los patos. Además, les convertiremos en proveedores directos para la compañía GlowCorp, gracias a la producción de un arroz con estándares de calidad suficientes para ello. Por último, estamos permitiendo que las comunidades más pobres accedan a un cereal de alto valor nutricional a un precio asequible, al mismo tiempo que se diversifican los medios de vida de los agricultores, aumentando su capacidad de resiliencia frente a los desastres naturales.