El planeta se enfrenta a un riesgo conocido desde hace años: el cambio climático. La meteorología es uno de los aspectos fundamentales en sociedades que dependen de recursos naturales como la agricultura, donde las inclemencias del tiempo influyen de manera determinante en la economía.

Entre uno de los países más afectados, por las consecuencias del cambio climático, se encuentra Guatemala, con uno de los grados de vulnerabilidad más altos a nivel mundial y una pobreza, sobre todo en el contexto rural, que llega hasta el 70% de la población. El país no está preparado para hacer frente a estas eventualidades y sacar adelante sus cultivos, en su mayoría relativos a granos básicos, maíz y frijol.

Es por ello que desde CODESPA pretendemos a que los agricultores del Corredor Seco de Guatemala superen las adversidades propias de su zona y prevengan situaciones de emergencia, siempre con el claro objetivo de obtener esa independencia económica que les permita valerse por sí mismos. En consonancia con el Instituto de Ciencia y Tecnología Agrícolas (ICTA) y el Ministerio de Agricultura de Agricultura y Ganadería (MAGA), ambos de Guatemala, y junto con la empresa española CROPTI, lanzamos un proyecto que durará 18 meses. El objetivo es desarrollar y facilitar tecnologías de información y comunicación (TIC), que aplicadas a sus cultivos, permitirán aumentar sus cosechas y por ende, incrementa los ingresos de 750 familias de origen indígena o mestiza.

Durante este período, las familias comprenderán y utilizarán mejores técnicas de gestión de sus sistemas productivos, no sólo desde el punto de vista técnicamente agrónomo, sino con un enfoque integral que les ayude a entender el funcionamiento del mercado y sean competentes de cara a un futuro cercano. Aprenderán a tomar decisiones para solventar emergencias y prevenirlas, además de disponer de las máximas alertas posibles para que puedan labrar de manera segura, eficiente e independiente. A través de una plataforma analizarán la información y la comunicarán, para después ser monitoreada y, a partir de ahí, emprender acciones positivas en términos de sostenibilidad medioambiental y la prosperidad, con especial énfasis en la mejora de las condiciones de vida en aspectos del día a día, como a nutrición de las familias.

Un camino unido a la tecnología

Las herramientas que tendrán a su disposición los agricultores familiares abrirán un nuevo canal de comunicación bidireccional con beneficios importantes en su día a día. La plataforma tecnológica en la que se basará permitirá:

• Ofrecer información agraria, fitosanitaria, climatológica, tecnológica y de mercado, lo que posibilitará que todos los datos recabados mejoren la productividad de sus cultivos, su acceso al mercado y la mejor utilización de los alimentos, es decir, de su situación nutricional.
• Obtener información precisa de los productores y así conectarles con los diferentes agentes del mercado que provean servicios de apoyo para adaptar su oferta y cubrir sus necesidades.

Esta plataforma estará adecuada a las comunidades guatemalteca más vulnerables y permitirá la comunicación entre un técnico y estos pequeños agricultores se haga más eficaz (asesoramiento, seguimiento…). Por otra parte, se adecuarán actividades formativas coherentes con su cultura, la ejecución directa en sus áreas geográficas y el desarrollo de actividades de implementación y difusión de la tecnología, todo ello para garantizar la participación de los productores indígenas. Nuestra meta es que este proyecto llegue a las comunidades más pobres, donde los índices de formación y la posibilidad de ir a la escuela han sido muy bajos.

La igualdad entre hombres y mujeres es otro aspecto fundamental en la lucha contra la pobreza en Guatemala

Más de la mitad de la población pobre de Guatemala se encuentra en situación de pobreza (51%) y es el colectivo femenino el más afectado en estas situaciones. A la ya conocida desigualdad entre hombres y mujeres, las características especiales de Guatemala imponen más obstáculos, puesto que repercute en el goce de los derechos ciudadanos y el desarrollo de las potencialidades. Esto ocurre debido a que sus tareas se relacionan con el cuidado del hogar y de los hijos, lo que no produce ningún aporte a la economía familiar ni la involucra en la sociedad de forma satisfactoria.

En el marco del proyecto descrito, las guatemaltecas tendrán acceso a la asistencia técnica y teórico-práctica que brindará la Dirección de Coordinación Regional y Extensión Rural (DICORER) y serán, por lo tanto, partícipes activamente de los procesos de fortalecimiento y la mejora de la producción comercial, así como se fomentará el empoderamiento de la mujer. De esta forma, se integrarán en sus respectivas comunidades y avanzarán tanto en el terreno personal como laboral.

Este es un proyecto muy ilusionante para nosotros y también supone un gran reto. Llevaremos y aprovecharemos las TIC para ayudar a las comunidades más vulnerables, incluso en zonas de pobreza extrema.

Si quieres, tú puedes convertirte en la ayuda que cientos de agricultores guatemaltecos necesitan, dona. ¡Gracias!