Perú es uno de esos países de América Latina que ha vivido un crecimiento económico desigual, un crecimiento que se ha olvidado de los más vulnerables. Poblaciones enteras se convierten en pobres crónicos, sin acceso a servicios básicos como agua o educación, sin oportunidades, ni esperanza de un futuro mejor.

Como ejemplo, la pobreza en Perú, a nivel global, en 2014 había descendido hasta el 22,7%, pero en las zonas rurales se mantiene en las dramáticas cifras de un 46%. Esto provoca que lugares como en Puno, una pequeña provincia situada a orillas del Lago Titicaca, todavía el 17,9% de los niños de menos de 5 años sufran desnutrición.

Pero hoy, en este post, no queremos seguir dándote datos de pobreza, queremos hablarte de un Perú diferente, concretamente de Puno. Desde CODESPA trabajamos, en nuestro programa de turismo rural comunitario, con diferentes comunidades de esta provincia.

Puno, la quinta ciudad más elevada del mundo

La capital de Puno está situada a más de 4.000 msm, convirtiéndola en la quinta ciudad más elevada del mundo. A orillas del lago Titicaca, que está a una altitud promedio de 3.812 msm, con una superficie total de 8.562 km²; de los cuales, el 56% de la superficie, pertenecen a Perú.

Te imaginas vivir en una de esas pequeñas islas que forman parte de este impresionante lago. Durante décadas sus habitantes han vivido aislados: sus culturas y costumbres se mantienen, su forma de vivir, su gastronomía tiene algo especial que le hace diferentes y en cuanto te embarcas a conocerlas, las aventuras son increíbles.

7 comunidades indígenas, de esta zona, se unieron a nuestros proyectos de turismo rural comunitario. Este es un turismo sostenible, con el cual estamos ayudando a que las familias obtengan un 30% más de ingresos, unos ingresos adicionales que están aprovechando para invertir en la educación de sus hijos y su alimentación.

Turismo rural comunitario un turismo sostenible para ayudar a los más pobres

Las comunidades Paramis, Ccotos, Tikonata, Luquina Chico, Uros Titino y Llachón quieren conseguir acabar con la pobreza gracias a este turismo sostenible. A través de estos proyectos tratamos de formarles para que puedan acceder a un trabajo sostenible y conservando sus ecosistemas (medioambiente y cultural).

Ahora ellos te cuentan su cultura: vives con la comunidad de Paramis su tradicional tinte de tejidos y el bordaje de sus tejidos, en Ccotos conoces su arqueología y leyendas contadas directamente por ellos, recorres increíbles senderos o incluso viajas en kayak en algunos lugares como Llachón.

Sus sonrisas hablan por ellos, tímidos pero orgullosos te abren las puertas a un mundo mágico, lleno de aventuras que ahora cualquiera de nosotros puede vivir.

Y a nosotros nos enseñas que creer en un mundo mejor tiene sentido. Vemos los cambios en sus vidas: sus casas mejoran accediendo a sistemas de agua potable; sus hijos pueden ir a la escuela y les compran el material que necesitan; y su alimentación mejora, consiguiendo diversificar los alimentos que toman.

Salir de pobreza no es un camino fácil, ni rápido, pero ellos lo han comenzado.