Aunque lleva solo dos años como Presidente, el recorrido de Manuel Herrando Prat de la Riba en CODESPA es mucho anterior. “Unos amigos fueron los que me hablaron de la fundación. Me quedé impresionado del trabajo que se hacía en favor de los más necesitados y su inclusión en el mercado”. Ahora CODESPA cumple 30 años y Herrando echa la vista atrás para recordar todo el trabajo que se ha llevado a cabo hasta ahora.

Recuerda el momento en el que comenzó su implicación con la organización hace ocho años cuando sus amigos le invitaron a formar parte del Patronato de la fundación. Según Herrando, en ese momento “pude conocer de primera mano la importante labor que realizaba ayudando a personas que sufren los devastadores efectos de la pobreza y cómo, aunque los medios sean económicamente limitados, se pueden lograr grandes cambios en su vida y la de sus familias. Me entusiasmó la idea de formar parte de este proyecto”.

Los proyectos que desarrollamos desde CODESPA buscan resultados que permanezcan en el tiempo. El objetivo es que CODESPA se vaya de la zona y las personas con las que hemos trabajado puedan seguir mejorando sus condiciones de vida, sin nosotros. “¿Qué proyecto recuerdo con más cariño?” Después de un rato pensativo, Herrando continúa: “Los proyectos de turismo rural comunitario me parecen muy originales, tienen mucho impacto y son replicables en muchos otros países. La sostenibilidad de estos proyectos es impresionante. También me llama mucho la atención el proyecto de desarrollo del mercado de la semillas en Angola, por su pertinencia en un contexto (Huambo, Angola) donde el 90% de población sufre hambre, por lo bien que está funcionando y por toda la gente a la que está llegando, reduciendo su inseguridad alimentaria”.

Como Presidente, uno de los aspectos que más le preocupan en la gestión de CODESPA es la transparencia. “En nosotros depositan su confianza grandes organismos internacionales, empresas, entidades públicas y personas particulares que desean canalizar su solidaridad a través de nuestros proyectos. Da igual el monto de la donación, a todos ellos les debemos el ser rigurosos en la gestión de los fondos que nos conceden, fieles a nuestra misión, y plenamente trasparentes a la hora de rendir cuentas y justificar lo invertido. En ese sentido somos muy exigentes”.

La importancia de las empresas

Una de las cosas en las que más se está trabajando es en conseguir una real implicación de las empresas en la labor que realizan las organizaciones para luchar contra la pobreza. Es primordial, y así se encarga siempre de resaltarlo el Presidente de CODESPA. “Se trata de un objetivo prioritario”, insiste, y así lo demuestra la nueva agenda de desarrollo en la que a nivel mundial se insta a las empresas a tener un papel protagonista.

Este año desde CODESPA ponemos en marcha el Observatorio Empresarial contra la Pobreza, una iniciativa con la que pretendemos llevar más lejos esa importante labor empresarial, formada por empresas que quieren poner sus capacidades al servicio de la erradicación de la pobreza en el mundo.

El papel del socio

Además del papel de la empresa, el papel del socio sigue siendo fundamental. “En las épocas de crisis, como hemos visto, hay recortes en la dotación de fondos de instituciones públicas por lo que uno de los objetivos fundamentales es incrementar la base de posibles socios y aportantes para sostener nuestros proyectos de acción social. Una labor muy difícil en momentos como los que hemos vivido de crisis económica. Hemos obtenido ciertos logros y vamos poco a poco”, señala Manuel Herrando.

El futuro

“¿El futuro? Cada vez será más decisiva la intervención de las empresas en la lucha contra la pobreza, tanto en beneficio de la sociedad marginada como también en beneficio de la propia empresa que no solo se verá reconocida por la sociedad sino también por la capacidad que supone la RSC para aumentar su negocio“, afirma Herrando. También recuerda la importancia del presente y el esfuerzo de adaptarse a las nuevas formas de comunicación cambiantes casi a diario. Destaca cómo desde CODESPA pretendemos llegar cada vez más lejos, para poder cambiar la vida de personas que está en situación de pobreza ofreciéndoles esa oportunidad que no han podido tener.

Nuestro treinta aniversario tiene lugar en un momento histórico a nivel mundial, en un año de suma importancia para quienes trabajamos en la defensa de los más pobres. Se acaban de aprobar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, una ambiciosa agenda para acabar con la pobreza y el hambre. Unos objetivos que asumimos como un reto y por los que lucharemos en los próximos quince años.