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La principal necesidad de Ecuador es la de llevar desarrollo equitativo a las poblaciones más vulnerables

La principal necesidad de Ecuador es la de llevar desarrollo equitativo a las poblaciones más vulnerables

Tras mi viaje a Ecuador puedo decir que las necesidades que hay en el país son muchas. Quizás en términos generales y como creo pasa en la mayoría de los países de América Latina, el principal problema para el desarrollo humano y sostenible es la desigualdad económica y social. Ecuador está creciendo en términos de PIB, e incluso es apreciable en sus capitales la inversión extranjera y el crecimiento económico. Esto sin embargo no llega, ni a todas las personas, ni a todas las regiones del país. La principal necesidad es por tanto, la de llevar desarrollo equitativo a las poblaciones más vulnerables, en la forma de educación, empleos, salud y teniendo en cuenta nuestras líneas de trabajo, en la forma de mecanismos de generación de ingresos sostenibles, o lo que es lo mismo que un pequeño cultivo agrícola se convierte en un negocio productivo, rentable, menos vulnerable porque cuenta con financiación, y que puede acceder al mercado y a los beneficios del crecimiento económico que caracteriza hoy por hoy al país en su conjunto.

Mi viaje por Ecuador

Si algo puedo destacar de mi viaje es lo que me ha sorprendido la gente. Me hicieron sentir como en casa. Son amables y afectuosos, y personas que no has visto antes en tu vida, te pueden hacer sentir fácilmente en casa, desde el primer momento. Son personas trabajadoras, emprendedoras, gente que lucha activa y permanentemente contra la adversidad y por mejorar sus condiciones de vida.

Desde CODESPA trabajamos para mejorar la inclusión económica y social de campesinos y productores. Por un lado, trabajamos en el fortalecimiento de los sistemas de producción y comercialización de asociaciones de campesinos, con un enfoque de cadena de valor. Por otro lado, les ayudamos a acceder a financiación. Para ello, colaboramos con instituciones microfinancieras para fortalecerlas y que tengan la capacidad de responder a las necesidades de crédito de las personas vulnerables, tradicionalmente excluidas del sistema financiero.

Lo que hacemos permite que campesinos produzcan y vendan de manera más eficaz, se financien de manera más eficiente, y por lo tanto generen, más ingresos y de manera más sostenible. También permite que las personas más vulnerables accedan a servicios financieros cercanos, permanentes y de calidad. Todo esto redunda en la mejora de las condiciones de vida de las familias y la inclusión económica y social de todos nuestros beneficiarios. Sin embargo, al momento de destacar un cambio, creo que lo más importante es que fortalecemos capacidades. Las asociaciones de productores, las instituciones microfinancieras, y las instituciones gubernamentales que participan en nuestros proyectos, mejoran su forma de hacer las cosas, aprenden metodologías e incorporan instrumentos, que les permitirán en nuestra ausencia seguir mejorando y creciendo. De todos los cambios, aunque sea más difícil de cuantificar, ese es en mi opinión el más importante.

Las microfinanzas son una oportunidad para crecer y mejorar.

Una cuenta de ahorro, o un crédito, puede ser clave para que un pequeño negocio familiar, se convierta en una microempresa con potencial de crecimiento que genera empleos, sólo porque que le permite invertir en activos, ampliar mercados o producir con mayor valor agregado. Además, son también una oportunidad para disminuir la vulnerabilidad. Nadie está exento de perder el empleo o de atravesar una mala racha en su negocio, pero el que cuenta con redes de apoyo, ahorros o seguros, tiene muchas más posibilidades de salir adelante y superar estas crisis que aquel que se encuentra excluido social, económica o financieramente.

Aunque se están consiguiendo muchas mejoras, es necesario que sigamos trabajando en Ecuador por la desigualdad económica y social que mencionaba anteriormente. Muchos de los esfuerzos del gobierno están orientados en una estrategia de transformación de la matriz productiva, con la que se busca que el país no se concentre en sectores de producción como la extracción, sino en otros de mayor valor agregado que atraigan la inversión extranjera. Nosotros, con nuestro trabajo, nos sumamos a ese objetivo nacional, siempre haciendo el énfasis para que este esfuerzo de mejora de los sistemas de producción se haga también en el nivel de las comunidades más vulnerables.