Rotador

Las dificultades para acceder a un empleo formal, que garantice condiciones económicas y de vida decentes, se multiplican en el caso de población de bajos recursos, que no puede acceder a servicios formativos adaptados a su realidad. Estas barreras aumentan en el caso de ser mujer, o de haber tenido un entorno familiar y social de riesgo.

Las barreras de entrada en las empresas, fuente de empleo cualificado, son muy elevadas en el caso de población vulnerable, que no ha podido especializarse, que no cuenta con una profesión, y que, como en la mayoría de los países en desarrollo, desde su infancia realiza trabajos distintos cada día en el sector informal, manteniéndose al borde de la subsistencia.

En CODESPA, consideramos que facilitar el acceso a formación es esencial para lograr un desarrollo económico y social, estable y digno. Así, promovemos la cualificación de personas de escasos recursos a través de programas de formación profesional, siempre orientados a la inserción laboral. Consideramos fundamental que la formación esté vinculada a las demandas de personal cualificado de las empresas locales, sin dejar de lado las necesidades de la población más desfavorecida: mujeres cabeza de familia, población en zonas rurales, jóvenes en riesgo de exclusión social y personas con discapacidad.