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Día Internacional de la Mujer: 200 mujeres congoleñas, víctimas de violencia sexual, lograrán su reinserción social

En el Día Internacional de la Mujer queremos contaros una gran noticia. Junto a Ferrovial comenzamos un proyecto que tiene el objetivo de cambiar la situación de vulnerabilidad en la que viven 200 mujeres víctimas de violencia sexual en Goma (República Democrática del Congo).

La ciudad de Goma, lugar donde se va a llevar a cabo este proyecto, se encuentra en la frontera con Ruanda. Es una de las más peligrosa e insegura de África debido a los grupos armados, el ilegal mercado de diamantes y el continuo conflicto armado de la zona. Las condiciones de vida a la que se enfrenta la población son cada vez más complejas, sin acceso a agua potable ni electricidad.

Por otro lado, la población tiene que salir todos los días a buscarse la vida. El tejido empresarial es inexistente y la tasa de desempleo alcanza el 80%, provocando que la mayoría de la población viva con menos de un dólar al día. Las mujeres, junto a la población infantil, son el grupo poblacional más vulnerable.

Protegemos a mujeres víctimas de violencia en Goma, R.D. del Congo

Daremos apoyo integral a 200 mujeres víctimas de la violencia sexual en la zona de Goma. Queremos ayudarles en su recuperación, tanto psicológica como afectivamente, para que puedan volver a integrarse en la sociedad y alcanzar, al mismo tiempo, su independencia económica y social. Para ello, a estas 200 mujeres se les ofrecerá un hogar donde podrán recibir asistencia médico sanitaria y apoyo psicológico, acceso a formación profesional y asesoramiento microempresarial para tener la posibilidad de volver a tener una vida digna. De todas ellas, 100 mujeres, que no hayan tenido la oportunidad de aprender a leer, ni escribir, formarán parte de un curso de alfabetización.

Desde Ferrovial y CODESPA queremos fomentar la autonomía de estas mujeres promoviendo su capacitación y su inserción profesional de forma que puedan obtener unos ingresos y mejorar las condiciones de vida de sus familias.

Además, sensibilizaremos a autoridades locales, líderes y sociedad general, para promover el cambio de actitudes que perpetúan la violencia contra la mujer en la sociedad congoleña. De esta forma, comenzaremos a construir un entorno seguro, donde las mujeres pueden recuperarse y construir su propio futuro. Es el caso de Gentinne, una mujer que gracias a este tipo de acciones ve un futuro esperanzador: “Ahora estamos aprendiendo matemáticas, nos enseñan a leer y podemos aprender un oficio, yo he elegido costura. Si pudiera pedir un deseo… sólo pediría acabar el curso, tener una máquina de coser y ganar mi propio pan”.